Cruce de los Andes 12x42k (26-28/feb/10): crónica Rubito

Es bravo tratar de trasmitir algo que sencillamente fue indescriptible... por las emociones, por el entorno, por el compromiso de equipo de completar la carrera, por los afectos dejados en Montevideo, en fin por muchas cosas solo comprensibles para los que pasaron por semejante experiencia.

Trataré igualmente de ser un fiel trasmisor de esas sensaciones que afloran en momentos extremos que al menos en mi caso no solo me ayudan a seguir corriendo con más ganas en busca de la meta si no que me hacen llorar de emoción mientras sigo en busca del ansiado arco.

Todo comenzó hace como 8 meses atrás con la iniciativa de compañeros (Dani, Trukero y Luis) que ya lo habían hecho con el equipo de A.del Prado. El resto del equipo aceptó el desafío y allí comenzó un arduo trabajo de TODOS los integrantes, los que fuimos y los que quedaron en Montevideo, para conseguir sponsor, transporte, indumentaria y todo lo que requiere un viaje de estas características, que con mucho laburo por suerte estuvo todo pronto para el día de partir ...

¡¡Qué día ese de la partida!!! ...una partida que estaba pactada para las 20.30 en el obelisco, pero a las 19 h llovió como nunca!! lo que hacía imposible (por las calles inundadas) llegar en hora al obelisco pero ni la lluvia frenó a amigos y familiares a que nos fueran a despedir.


También nos dio una grata sorpresa el señor Gustavo Zerbino quien puede hablar con propiedad de la cordillera y nos dio palabras de aliento para cumplir este desafío. Así fue que comenzó el viaje hasta San Juan. Ni más ni menos que 25 horas de viaje hasta el estadio Cantoni de esa ciudad que se encontraba festejando la semana del sol. Por ende era impresionante el movimiento de gente en los alrededores. De todas maneras dejamos los bolsos y salimos a entrenar.

Entre compras y caminatas pasamos los días a la espera de la distribución de los compañeros por los refugios a lo largo de la cordillera para las diferentes etapas, pasta party mediante nos tuvimos que separar, y ya no vernos con algunos hasta el fin de la carrera.

Los que quedamos en San Juan fuimos: en un cuarto, Pollito, Nacho, Tortu (el mejor delegado por lejos de todos los equipos del cruce) y en el otro cuarto los que estábamos con familia, Fati con Gabi y las nenas y yo con Sil. Si bien ya nos conocíamos bien, en esos días fuimos juntos a todos lados las 2 familias y compartimos gratos momentos, salvo cuando las nenas no me prestaban las benditas XO !!! jeje, que era el medio de comunicación que teníamos en el estadio de San Juan. GRACIAS Gabi por todo el aguante y por brindarnos tan cálida amistad !!

Pasamos muchos nervios en cada llegada muertos de frío a la espera de los compañeros que estaban corriendo, pero de eso también se trataba la carrera (mejor dicho carrera para algunos equipos, para HALCONES fue un desafío).

Serán inolvidables las mañanas y tardecitas en las que nos íbamos a tomar mate al parque las 2 familias juntas!!!!!

El día previo a la carrera fue bravo para los que estábamos en San Juan ya que la noche previa a nuestra carrera se alojó una murga integrada por adolescentes que al mejor estilo copa libertadores de antaño no dejaron dormir en toda la noche !!! Los corredores a la mañana siguiente muertos !! Parecía que ya hubiesemos corrido los 42km. De yapa yo con vómitos !!! Justo el día antes!!! (prometo no comer más milanesas y fritas el día antes!!!) pero por suerte y por las gotitas estomacales de Gabi fue pasando.

A esa altura los nervios eran insoportables... Nacho, como loco !! casi lo atamos!! Pollito a todo cyber y acomodando las 4 millones de bolsas que tenía de equipaje en las que no faltaba ni banquito!!!...siii se llevó un banco desde Montevideo, el Tortu comprando compulsivamente y atendiendo sus 3 celulares a la vez -era un espectáculo aparte-, el Fati tranqui como agua de pozo, nunca se le movio un pelo !!! (salvo en el bus!!!) jeje y bueno yo saliendo de los vómitos y con el aguante de Sil la llevaba, pero los nervios y la presión personal de no abandonar por nada en el mundo me tenían tranquilo... como el demonio de tazmania!!

Mi cinto de hidratación tenía colgada una enfermería portátil pensando en la rodilla. Me colgaban cintas, cremas, vendas, una linterna de mano, geles, caramelos, chocolates. De todo !!! Parecía el cinto de Robocoop!!

Previa entrevista y presentación se largó la carrera en la cual nuestro primer Halcón en representarnos era Nachito. Ya en esa primera etapa vimos muestras de una organización que deja bastante que desear, en la que fueron claros con el tema de asistencia a corredores, lo cual sería eliminatorio y, por el contrario, ya en la 1ª etapa no se cumplió, en la que los Uruguayos fuimos cumpliendo al pie de la letra el reglamento y nos encontramos con varias irregularidades.

En la etapa de Nacho hacía mucho calor y como decía el reglamento (llevar camel back o cinto de hidratación ) así lo hizo Nacho pero se le acabó el agua al poco rato. Al no poder asistirlo, le bajó la presión y sólo llegó porque los Uruguayos tenemos eso que algunos le llaman garra. Mientras, otros corredores corrían sin nada y eran asistidos desde autos: Pero, en fin, como dije antes, para nosotros no fue una carrera, fue un desafío. Y si algunos quedan contentos ganando así, allá ellos.

Yo estoy loco de la vida por lo que conseguimos, y si en el mundo son pocos que tienen el privilegio de correr 42km somos menos aún los que lo hicimos en la cordillera y eso me deja muy feliz.


La camioneta nos llevó hasta el final de la etapa 1 donde largaría yo apenas llegara el 1º. Estuvimos esperando más de una hora. Esa hora me cansó más que todo el viaje desde Montevideo. No podía dejar de mover las piernas en el lugar de tanta ansiedad y de susto también !! A esa altura ya eramos una familia los que estábamos del equipo abrazados y llorando a cada partida y arribo de un compañero. En eso llegó el primero de la etapa de Nacho y largamos!!!!

Yo, como un angelito, esperando que avisen "larguen" o que bajen una bandera!!! Negativo, llega el primero y se van!!! Demoré 5 segundos en reaccionar y largué. Obvio, perfil bajo, me acomodé con los últimos (ya había avisado a Sil , que no se pusiera nerviosa si me veía último, que lo que quería era llegar para cumplir con el equipo). Estuve 500 metros en ese grupo pero me pareció muy lento. Entonces apuré un poco y me coloqué detrás del segundo con el que hice algo así de 2 kms, digo algo así por que no llevé gps, y el crono no me marchó, o sea no sabía ni cuánto había corrido. Por esa altura tomé la decisión de dejarlo ir pues tenía un paso fuerte y tuve miedo de "pincharme" antes y no llegar a la meta, así que planifiqué seguir solo a mi ritmo y con todas las ganas que tenía de completar este desafío.

Gracias a Dios, la rodilla nunca se enteró de que corrí 42kms. Creo es milagro o tal vez un maratón me lesionó y otro también me curó... vaya uno a saber...

Hice 14km en una recta y con subida muy gradual que no se sentía en cuanto a esfuerzo y allí estaba el desvío (con gente señalizando, que era mi gran preocupación) y el puesto de hidratación que no era más que 2 chicos con pinta de voluntarios con una botella de 2 litros por la mitad de agua que te ofrecían llenarte el camel y tomar del pico (si pasara en Uruguay me imagino lo que serían las pizarras de los sitios web!!!).

Como casi no consumo agua, me tomé una botellita en el puesto para que me la repusieran por si la tenía que usar pues se venía la trepada!!! Ya subiendo, un camión se me vino bastante arriba y me fui a la banquina. Al intentar volver... lo que no podía pasar!! Me torcí el tobillo. Por suerte pude amortiguar el cuerpo instintivamente y no dolió por mucho tiempo. Ya subiendo la pre cordillera, con repechos bastante empinados y constantes desde ahí hasta el final, sentí un poco el ritmo que traía, pero salieron a flote un montón de sentimientos que me traje desde Montevideo: Facu y Belu, que quedaron con mi vieja, a los cuales hacía una semana no veía y me traje sus collarcitos como amuleto para cuando el cansancio fuese más fuerte que mis piernas (solo que mis piernas, más fuerte que mi cabeza no existe nada!!) Sabía muy bien lo que quería y me caían las lágrimas una tras otra, pero a la vez corría más y más convencido de llegar.

Luego me quebré a llorar cuando en la camioneta de la organización en la que iba rumbo a mi llegada mi esposa y compañera de todas las locuras mías, junto a los compañeros de equipo, me alentaron cuando me pasaron en plena subida. Los gritos de Nacho, Gabi y las nenas, Fati, Pollito y por supuesto Silvana me dieron toda la fuerza pero a la vez me quebré a llorar y no podía parar !!! Pero pasaron rápidamente y otra vez quedé solo contra la montaña. Nuevamente comenzó el cansancio y otra vez puse a insultarme en voz alta para darme aliento.

Una y otra vez mirando de reojo la bandera URUGUAYA que llevaba atada a mi hombro, sumado a los gritos muy esporádicos de gente de la organización a la vera del camino que me decían "dale uruguaio vas tercero" me llenaban de alegría y emoción. Se me erizaba la piel y las lágrimas caían sin poder dominarlas !!! Dejé de ser Rubito por 4 horas para ser "el Uruguayo" , jamás me olvidaré de todo esto.

Pero la carrera sigue y el cansancio aumenta. Para eso tenía un plus: me llevé una medalla que me la dio mi vieja cuando ya no tuve más a mi viejo, así lo tendría presente en la soledad de la carrera. En cierto momento no sé si fue el famoso muro o mi ritmo era demasiado rápido, las nubes cubrieron la hermosa luna llena que me alumbraba y además venía bastante agotado, fue ahí que le pedí a mi viejo que sabía que desde allá arriba me estaba ayudando: "viejo, sé que estás ahí, ayudame a llegar". Casualidad o no sé que pero las nubes despejaron la luna y solo se nublo al poco tiempo que terminé la carrera. La alegría que sentí (cuando pude parar de llorar) fue indescriptible....

Justo es decir que, a pesar de muchisimos baches organizativos y de incumplimiento de reglamentos en mi etapa, me sentí bastante protegido por la ambulancia que cada veinte o treinta minutos aparecía una y otra vez preguntando cómo estaba.

En cierto momento tuve ganas de salir a buscar al 2º pero desistí evaluando que me llevaba mucha ventaja y me podría agotar antes de llegar y así perder de vista mi objetivo de llegar así que seguí a mi ritmo. En un momento, al pasar por entre dos montañas caen un par de piedras rodando, las que me asustaron por el ruido, pero jamás me imaginaría que fuera algún pequeño movimiento precediendo al sismo tan devastador para nuestros hermanos Chilenos (desde Uruguay toda la fuerza Chile).

Ya llegando viene otro desvío en el que no había nadie para preguntar el camino correcto, así que me la jugué por el que se veía que era el seguro de llegar, pero corrí y corrí en medio de la desolación y llegó un momento en que pensé en dar vuelta a tomar el otro. En eso, una camioneta me señala que iba bien y que me faltaban 2 km para la llegada, interminables por cierto. Allá a lo lejos veo un par de lucecitas y le di con lo último de energía que me quedaba. En eso Tortu me alcanza el Pabellón de mi bendito país y cruzando la meta llorando me abracé con Sil y los compañeros todos llorando acobijados por nuestra bandera!!!

Pero esto no terminaba. Me hidraté algo, troté un rato y a la trafic (por un día y medio sin bañarnos ni estirar). Ya en la trafic ésta derrapó algo para el costado y Tortu nuestro delegado vino a los gritos: "está temblando el piso!!!". Una experiencia inédita para nosotros los Uruguayos, al rato nos enteramos del desastre en el país hermano de Chile.

La carrera continuó, así que fuimos a la llegada de la siguiente posta que la estaba corriendo uno de nuestros capis, Pollito. Ya a esa altura el frío era intenso pero el calor humano del equipo era mayor!! Lo esperamos todos abrazados bajo una frazada !!! ... hasta que llegó y nos fundimos a llorar todos en un abrazo entre el grupo.

Lamentablemente, por temas organizativos llegó sin arco y con poca gente, menos gente vio Susana Segurel (capitana de los Chasquis) a la que personalmente le alcancé la ropa seca, y solo quedaba el fiscal para darle su merecida medalla. Pienso que simplemente con otro arco se le daría la oportunidad al corredor de pasar por debajo de tan preciado objetivo para cualquiera que corre...

De ahí otra vez a la camioneta a esperar a nuestro cuarto atleta, "Fati", que largó antes de la llegada de Pollito. En el camino, al pasarlo, y con la gran amabilidad de nuestro chofer Cristian (que la gastó, gracias por todo flaco !!!), Fati venía con los primeros, pero así y todo nuestro compañero paró a saludar a su familia y a nosotros, cero nervio el tipo!!!, y siguió rumbo a la llegada que era en el pueblito de Iglesia, al cual llegamos aproximadamente una hora antes.

Pudimos estar en la previa con otro compañero, "Trukero", que bajo una capa de protector solar, cual si fuera un mimo, se hizo a la ruta mandándose un carrerón y culminando segundo en la etapa. A todo esto, Fati no llegaba y los nervios de su familia eran los de todos los que estábamos haciendo el aguante en la llegada, hasta que lo vimos llegar y terminamos en el abrazo de todo el grupo.

Una vez más a la camioneta y a seguir en busca de la llegada de "Trukero" y la largada de Yeritano. El "Yeri", a quien no veíamos desde hacía días, fue a mi gusto quién realizó la etapa más dura: la 6, quien finalizaría en 3º lugar.

Luego de su largada, todos expectantes por la llegada de "Trukero" , hasta que uno de los suplentes de lujo que llevamos, Pablo Gardiol, parado en un montículo lo divisó a lo lejos y la algarabía del equipo fue muy bulliciosa. Nuevamente terminamos en un abrazo todos llorando!!! ... A mi modo de ver, hasta aquí fue una carrera, ya que en una decisión creo acertada por la organización decidieron llevarnos directamente a la posta 11, ahí si bañarnos y descansar algo.

La verdad no se cuánto tiempo estuvimos sin dormir pero, en contrapartida, el resto de nuestros compañeros quedaron algo desprotegidos y sin el aliento del resto del equipo, tan necesario en la soledad de la montaña.


De hecho, nos enteramos al otro día que una tormenta de nieve hizo que la organización tomara la decisión de bajar a 3 corredores, entre ellos Dani, por un tema de seguridad.

Tampoco vimos a Anita, que se mandó un carrerón terminando tercera, aún con algunos kilómetros nevando.

Luego de ella largó Gucci el cual también estaba muy solo, pero por lo menos recibió el aliento de Jorge que se encontraba en el refugio de la aduana al momento de su paso, que de yapa venía con problemas estomacales desde hacía días. De todas formas cumplió y con creces con el espíritu Halcón que era llegar dejando todo!!

Después largó Jorge , el más tranki del equipo, al cual tampoco vimos. Por eso creo cobra más valor lo que consiguieron ya que personalmente la principal razón de seguir hacia la meta era que me esperaban ahí mis compañeros y familia, cosa que ellos no tuvieron...

Con estos dos compañeros creo hay un bache organizativo imposible de tapar con nada. Estos compañeros alquilaron un transporte desde el final de la etapa hasta La Serena (donde sería el acto de clausura, finalmente suspendido), ya que quedaron totalmente olvidados luego de correr 42km.

Tampoco vimos a María, nuestra participante en la etapa 11. Ahí nadie tuvo nada que ver, salvo mi desinformación de que la largada era a escasa media cuadra de donde estábamos descansando. Esto, sumado al cansancio de tantos días sin dormir, llevó a que no la viéramos largar. Sí la vimos y alentamos en carrera. Este tramo según nos contó María tuvo escasa o nula hidratación !!algo que no puede pasar teniendo en cuenta la alta temperatura reinante !!!

Por último, a los corredores de la etapa 12 , que eran "Magic", el otro capi, y Patricio, un suplente de lujo (el cual ganó la etapa, a sabiendas que no contaría su tiempo), tampoco contaron con nuestro apoyo en la largada. Sí Magic tuvo nuestro aliento en carrera y a la pasada de la camioneta le mostramos la foto de sus hijos, lo que le dio la fuerza necesaria para terminar así su etapa y por ende cumplir el desafío que nos propusimos ....HALCONES COMPLETÓ EL CRUCE DE LOS ANDES!!!


Esta carrera me deja muchas cosas: primero, una experiencia inolvidable, en la que experimenté cosas impensadas en mi vida, como por ejemplo el montón de sentimientos que afloran en la competencia en medio de la soledad y que creo que todos teníamos escondido en nuestro interior. Los míos ya los dije, Nacho que no lo ví pero lo conozco como un hermano y con todo lo que lloró en la despedida, sin duda creo que el soporte emocional para llegar fué su familia y su sobrinito "Teto", Pollito en su llegada entre frío abrazo y lágrimas me dijo que cada vez que pensaba en parar se acordaba de su hijo Marquitos, Fati se fundió al llegar en un abrazo interminable con Gabi y Vale y Lucía, cuando llega Trukero abrazados llorando le digo esto es para Josefina !!! la bebé que esperan junto con Caro para dentro de muy poco tiempo "...y sí, es para ella" me dijo y nos abrazamos muy fuerte!! Magic, que hizo todo apoyado en el afecto de su familia y que rompió a llorar cuando le mostramos las fotos de sus niños!! Supongo que los demás que no pude ver tendrían sentimientos parecidos.

Por otro lado, me queda la alegría de conocer gente extraordinaria, por ejemplo, el equipo que compartimos la mayoría del viaje: Los Chasquis !!!, el equipo de compañeros con capacidades diferentes, que nos dan una lección de vida minuto a minuto. Fue un deleite compartir el viaje con ellos: "Pelito", Rubén, Soria y su guía, Susana Segurel, entre otros , gracias por ser como son !!!!

También me queda un gusto amargo por el tema organizativo y reglamentario. Creo que la montaña tiene todo lo necesario como para que cualquier corredor quiera ir a correr, pero con estas falencias y abismos en algunos casos, mas allá de la hermosura del lugar esto le saca las ganas a cualquiera de volver. De todas maneras, una experiencia que jamás olvidaré!!!

Llega el turno de los agradecimientos. Me propuse no nombrar a nadie para no ser injusto pues fueron muchísimas personas que me ayudaron y alentaron. Quiero que sepan que cuando estaba cansado me decía a mí mismo: "a ... no le puedo fallar!!!", "...a ....tampoco le puedo fallar" y así fui desandando los 42km rumbo a la meta. Solo quiero nombrar a tres personas puntales en todo esto (aparte del equipo y la familia): a mi fisiterapeuta Seba Basilio, que estuve durante 6 meses redonditos 3 veces por semana tratando de subsanar la tendinitis de la rodilla, a mi compañero Pablo Lapaz, que más de una vez me dice que disfrute las carreras y me compenetre del entorno, cosa que hice (corrí con la linterna apagada alumbrado por entre las montañas con la hermosa luna llena y la verdad no quería que la carrera terminara nunca), y también quiero agradecer a un "amigo facebook " que ni siquiera conozco personalmente ya que es uruguayo pero se encuentra en España: a Daniel Polla (ex Corredores de las Piedras), quien durante mucho tiempo me aconsejó con la rodilla y entrenamientos... GRACIAS!!!!!

También quiero agradecer a los compañeros y compañeras que se quedaron en Montevideo haciendo el aguante, a las personas que nos acompañaron: Gabriela Viude con sus niñas Vale y Lucía; Silvia, la señora de Dani; Gisella, la novia de Pablo; Silvana, mi super esposa; Pablo y Patricio, compañeros de lujo .

Y COMO SIEMPRE, TODO ESTE GRAN ESFUERZO VA PARA MI FAMILIA !!! SIL ...FACU ...BELU...MI HERMANO ...MI VIEJA ....Y PARA MI VIEJO QUE ME LA DIO PARA ADELANTE DESDE ALLÁ ARRIBA !!!!.........

Nos vemos

RUBITO"